CRUCIFUCK:
Una foto de Julián, cantante y guitarrista de la banda. Estuve hablando con él un rato y me pareció un tío como pocos, de putísima madre, y como hay que ser: HUMILDE. La actitud en el Metal no es ser el más macho, sino trabajar y dejarte la piel por lo tuyo.
Me comentaron que tocaban Thrash Metal muy guarro, al estilo de Possessed y Overkill. Una vez vistos, la influencia más clara de estos chavales es Morbid Saint, de hecho, el disco favorito de Juli es el enorme Spectrum of Death, lo dicho, unos cracks. Morbid Saint, los primerísimos Kreator, Possessed, incluso reminiscencias del Scream Bloody Gore de Death. Tres tíos sobre las tablas para arrasar con todo, una sola guitarra. Thrash/Death, el vocal cambiaba entre una voz desgarrada, gutural y algún agudo de vez en cuando. Los vi alternando primera y segunda fila. Se marcaron dos versiones, una de Emofilia (otros de Salamanca, ni idea), y cerraron con All Guns Blazing de Judas Priest. Precisamente la primera que oí de ellos.
Después de 40 minutos de Blasfemia, Odio y un sonido de culo pero a toda hostia, un parón, una charla, y subieron los Angelus al escenario.
ANGELUS APÁTRIDA:
El ambiente se calentó rápidamente cuando sonó la intro The Manhattan Project, y luego, PUM, cañonazo guitarrero y sonó Blast Off, mi favorita de ellos. Con un sonido bastante mejor que Crucifuck, la sala Potemkin de Salamanca se convirtió en una caldera. Me dejé la voz en ese tema y prácticamente en todos (sufriendo las consecuencias, tengo un bulto en la garganta). Tocaron bastante del Clockwork, intercalándolas con temas del Give ´Em War y un par del Evil Unleashed. Cayeron todo clásicos: Of Men and Tyrants, Devil Take the Hindmost, Fuck You, Versus the World, Corruption, The Misanthropist, Clockwork, y en el bis, Vomitive y Thrash Attack. Me faltan algunas, como In The Heart of the Nations y demás, pero bueno, cuando haga una crítica decente y pille el setlist la haré en condiciones.
Una apisonadora en directo, 80 minutos de puro Thrash Metal. Y de Albacete, atesoran un gran futuro, cimentado en talento, calidad y humildad. Mi colega Germán se llevó una púa y yo , un apretón de manos y hablando un corto rato con Polaco, ya que tenían prisa. Las anécdotas fueron , cuando Polaco dijo "¿Qué es esa fiesta de ahí fuera, que estan todos borrachos? La de enfermería, dije. Pues igual hacen falta enfermeros. Esta va por los enfermeros, y copón, por todos los demás". Y que tocando una de las últimas, exigieron un último Mosh Pit o no tocaban. Unos cracks. No soy amigo del Mosh Pit, pero si de cantar, vocear, y animar en primera fila. Primera vez que los veía y MUY satisfecho. Enormes tanto ellos como los más amateur Crucifuck. Un concierto sin paliativos, de diez. Por muchas giras europeas que hagan, se nota cuál es la casa que los vio nacer.
