miércoles, 18 de abril de 2012

Koloss - Meshuggah [2012]

Ahora sí, desde tierras charras, volvemos a la carga. Antes de nada, quiero hacer una consulta relativamente importante a todos los que podáis leer este Blog. De normal suelo subir discos sin atender a mucho orden lógico más que ofreceros un poco de variedad, pero he tenido la idea de seguir reseñando discos de este año 2012 durante un período de tiempo sin determinar, ya que de éste año sólo os he subido el de Alcest y de esto hace ya unos meses. Por eso os pregunto directamente, ¿preferís que siga con la línea que llevaba hasta ahora (también conocida como "subo lo que me sale, como me sale") o que vaya reseñando discos de 2012 como me dispongo a hacer? Ya me dejaréis comentarios y eso.

Meshuggah no son precisamente unos recién llegados, llevan desde finales de los 80 en activo y reconocidos como los pioneros del ya en boga Math Metal o Djent. A grandes rasgos, su sonido se puede reducir a una especie de Post-Thrash/Death técnico/progresivo, con abundante uso y abuso de polirritmos, disonancias y ese distintivo tono de guitarras que tantas bandas del género han querido hacer suyo. No es una de mis bandas predilectas, pero he escuchado la mayor parte de su discografía. Poco a poco se han hecho un nombre a base de mantener un estilo, una forma de tocar, pero con la suficiente variedad y originalidad para seguir adelante, no en vano Koloss es ya su séptimo LP de estudio.

Ahora no tengo ninguna duda de que Meshuggah significa loco.

Ya os he comentado que no soy precisamente fanático de los suecos, me parecen un grupo con talento, pero que en dosis grandes satura mi cabeza, necesito escucharlos poco a poco, pero ya os digo, tienen calidad para dar y regalar. Podría hablar de que Fredrik Thordendal es un guitarrista de Jazz metido a tocar Metal, su capacidad de crear riffs únicos o solos altamente influídos por Allan Holdsworth, el tridente rítmico de Thomas Haake (espectacular en el 4/4 lento, una disciplina así no se encuentra en todos los baterías), Marten Hägstrom es un rítmico a la altura y el ya asentado Dick (HAHA, PENE) Lövgren recubriéndolo todo con unas líneas de bajo densísimas, es marca de la casa, pero el integrante que más me gusta del grupo es, sin duda, Jens Kidman. Una voz que ha hecho suya, una voz gutural a medio camino entre el Groove y el Death, que vocaliza bien, es potente y técnica, y unos fraseos muy rítmicos, que no hace sino demostrar que Meshuggah es una máquina de ritmos, con 5 engranajes que funcionan a la vez. ¿Qué han parido esta vez? Vamos a intentar analizarlo:

En primer lugar, un comunicado de la banda afirmaba que sería su trabajo más pesado. Duras declaraciones de gente que ha parido dos apisonadoras letales como Chaosphere (mi favorito) o el reciente obZen. Bueno, I Am Colossus está entre lo más denso que han grabado, posiblemente. Es un tema lento, machachón y con marcado acento Groove, más de lo que acostumbran. Kidman es la bestia que maneja al coloso (aunque ojito a la línea de bajo), si bien no es un tema de ejecución tan compleja como acostumbran, es una manera de destrozar oídos, o de empezar a hacerlo, porque esto recién comienza. The Demon's Name Is Surveillance nos devuelve a los Meshuggah que encandilaron a la escena hace ya años, concretamente me recuerda mucho al Nothing, pero con un extra de contundencia. La máquina rítmica que es Haake acelera por un lado, mientras el venenoso vocalista hace la guerra por su cuenta, con algunos gritos que demuestran su nivel vocal, arrojo e intensidad. A partir de riffs monótonos crean una atmósfera opresiva y brutal, y eh, no tocan Doom Metal, sino lo contrario. El solo es marca de la casa, frío, despersonalizado en el mejor de los sentidos, y cumple entre ese mar de riffs afilados como navajas, de mis favoritas. Do Not Look Down tiene un aire Industrial en el bajo, muy al estilo de Meshuggah, claro, con esa precisión matemática y las melodías ponzoñosas de los solos, el cambio de ritmo... gran tema. Y seguimos dándole al Groove.

Behind the Sun es el cuarto corte. Tras el sol no hay más que tinieblas, y de eso el tema sabe bastante. Introducción acústica, íntima en este mar de riffs fríos e impenetrables, un tema lento de verdad, de nuevo muy Groove, donde yo destacaría el trabajo de Haake, no necesita de blast beats para demostrar lo bien que toca, en la parte central intenta acelerar, pero ni él mismo puede salir de semejante pantano (ojo al intento de melodía de fondo, el tema es un agujero negro que engulle toda la luz). Al final cobra vida y rabia propias, para brindarnos un poco de agresividad en movimiento, e intentos desesperados por ofrecer unos instantes melódicos que nunca asoman a la superficie. Por otra parte, un tema cuyo título es The Hurt That Finds You First debería ser más veloz, ¿no? Lo es. El comienzo es puro Chaosphere, veloz, seco pero igual de abrasador y eficaz, a ritmo de Math/Death, y de mis favoritas del disco, amén del factor variedad que siempre pido en un disco. La parte central parece un poco más lenta merced a los rugidos de Kidman, y el final ya quita el pie del acelerador, una especie de trance lento y no tan doloroso, hasta melódico. Marrow es Groove Metal técnico de nuevo, machacón, oscuro y rítmico, el trabajo a las cuerdas es justo lo que uno le exige a la banda, de nuevo intercalando solos para hacer la escucha más interesante, con erótico resultado. Me fascina el tono de guitarra de Thordendal en los solos.

Break Those Bones Whose Sinews Gave It Motion es el título más largo del disco, en letras y en minutaje, casi 7 minutos. De nuevo empieza melódico pero oscuro, un riff que da mala espina hasta que entra el cuerpo del tema, esa máquina de hacer riffs basados en el ritmo, lento como es tónica en este trabajo. Hasta el minuto 2:30 o así el tema no gana un poco en dinamismo, y cerca del final hay otro interludio donde una melodía oscura (3:55) crea más tensión que los riffs graves. A los fans de los temas oscuros y pesados os encantará, personalmente sigue la tónica del disco y la eleva, pero no es de mis favoritas. Swarm nos devuelve de nuevo a la época intermedia de la banda, con una marcha más en velocidad, un tema con evidentes toques progresivos, con la técnica característica de la banda. La parte central es exquisita, es la faceta del grupo que más me suele gustar, los toques cambiantes y progresivos. El solo a base de disonancias malévolas y la manera de Haake de aporrear su batería cierran otro de los mejores cortes del disco.

Demiurge empieza con sonidos de fondo hasta que entra el primer riff. En la tónica de los temas pesados del disco, pero con un aire Industrial/Avant-Garde que me llega a recordar a ratos a (salvando las distancias estilísticas, por supuesto) Blut Aus Nord. Los cambiantes riffs, y la sensación de aplastamiento están mejor conseguidos que en otros temas, así que se convierte al instante en uno de los mejores cortes del disco. The Last Vigil es ya el último corte, no tiene nada que ver con el resto del disco, aquí se busca la atmósfera a través de suaves ecos de guitarra, una especie de Post-Rock que poco tiene que ver con los 9 temas anteriores, salvo la sensación de monotonía (siempre positiva), y que da el pego como último corte del disco.

Koloss podría resumirse fácilmente en: juntamos algunos puntos de la trayectoria de Meshuggah, le damos una capa de pintura más Groove que nunca para evitar repetirnos demasiado, y todo ésto con la solidez característica del quinteto, además de una de las mejores producciones que han podido tener. Thordendal maneja como nadie la guitarra de 8 cuerdas y es un maestro de los riffs sincopados, y aquí vuelve a demostrar que, dentro de la escuela Math que ellos mismos han creado y otros han imitado (con mayor o menor fortuna), siguen siendo amos y señores. No es su mejor disco, pero desde luego mantiene el tipo, y se destapa como uno de los discos más pesados y abrasivos de su catálogo.

Bueno, con ésto termino, no sin antes esperar que os gusten disco y reseña, y que por favor, comentéis a ver qué preferís, si voy reseñando discos nuevos más a menudo o sigo con la línea de siempre. Un saludo.





3 comentarios:

  1. Yo prefiero que subas lo que te de la gana, ya te lo dije. Por otro lado, buena reseña, como siempre.

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  2. Lo ideal sería que reseñes los que te dé la gana, pero si hay algo que merezca mención de este año, que lo hagas, siempre que superen el nivel de calidad que consideres, o que te apetezca comentarlo.

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  3. Lo que ami consierne sería que reseñes lo que más te agrada y siempre y cuando sean trabajos sorprensentes.

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